Baní.-La comunidad de Cañafistol, se encuentra profundamente consternada tras
el trágico asesinato de Nelson Francisco Roa Encarnación, conocido popularmente como el dueño de Agua Peravía.
El
hecho ocurrió este sábado dentro de su propio negocio, donde fue
atacado a tiros por un individuo que, según testigos, fingió ser un
cliente.
De
acuerdo con informaciones preliminares,
el agresor entró al local comercial con la intención aparente de comprar
un botellón de agua, pero acto seguido sacó un arma de fuego y disaro
en múltiples ocasiones contra Roa, quien se encontraba atendiendo
personalmente en ese momento.
Tras perpetrar el crimen, el atacante huyó del lugar con rumbo desconocido.
La Policía Nacional, se trasladó rápidamente a
la escena del crimen, donde ha comenzado a recopilar evidencias y entrevistar testigos para esclarecer lo sucedido.
Las
autoridades no han ofrecido detalles oficiales sobre la identidad del
homicida ni el posible móvil del ataque, mientras la población exige
justicia.
Nelson
Roa, era reconocido en la zona como un empresario trabajador y muy
apreciado por su comunidad, destacándose por su trato cordial
y su compromiso con el servicio a los demás.
Aunque
las circunstancias del crimen aún no están del todo claras, testigos
coinciden en
que fue un ataque directo y sin previo aviso. “Llegó como si nada, pidió
agua y le disparó varias veces. Todo fue muy rápido”, relató uno de los
presentes que prefirió mantener el anonimato.
El
cuerpo de Roa, fue levantado por las autoridades competentes para los
fines correspondientes. La investigación continúa en desarrollo, y se
espera que en las próximas horas se ofrezcan mayores detalles sobre este
lamentable e impactante suceso
Nelson
Roa, había sido vinculado en mayo de 2021 a la muerte de un gallero y
productor agrícola identificado como Manuel Alejandro Sanquintin, alias
“Alex Pi”, quien falleció tras recibir disparos en una finca de la
comunidad de Bocacanasta.
Hasta
el momento no se ha confirmado si el asesinato de este sábado guarda
relación directa con aquel caso, pero la Fiscalía y la Policía Nacional
han abierto una investigación para esclarecer el hecho y determinar
responsabilidades.
Su muerte ha generado una ola de tristeza, indignación y miedo entre los residentes de Cañafistol y zonas aledañas.
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